23 mar 2025
El M23 no acata el intento de alto el fuego
Continúa la crisis en República Democrática del Congo (RDC), con nuevos roces diplomáticos y nuevas ganancias en el terreno para los rebeldes del M23.
El pasado 18 de marzo se deberían haber reunido los presidentes de RDC y Ruanda y los líderes del M23 en Luanda, con el fin de mantener conversaciones para la paz bajo el auspicio de Joao Lourenço, presidente angoleño y mediador de la Unión Africana en el conflicto. La mera celebración de esta reunión suponía un importantísimo avance, ya que era la primera vez que Felix Tshisekedi, el presidente congoleño, accedía a reunirse con el M23, considerando hasta ahora que Ruanda era quien está detrás de los rebeldes y con quien realmente debía conversar. Finalmente, el encuentro no se celebró, ya que el M23 decidió retirarse en protesta por las sanciones que la Unión Europea impuso un día antes. Las sanciones también incluyen a dirigentes militares ruandeses, lo que ha llevado a Kigali a romper relaciones diplomáticas con Bélgica. No obstante, apenas un día más tarde, Tshisekedi y su homológo ruandés, Paul Kagame, se vieron en Doha: la reunión, celebrada en estricta confidencialidad bajo el patrocinio del Emir de Catar, Tamim bin Hamad Al Thani, concluyó con una petición conjunta y pública de un “alto el fuego inmediato e incondicional”. Esta decisión no ha sido acatada por el M23, que ha continuado avanzando hacia el oeste de RDC y ha tomado la ciudad de Walikale.